

Un porcentaje mínimo de personas encuentran en la Comunidad Valenciana trabajo a través del SERVEF, Servicio Valenciano de Empleo. Frente a la imprescindible referencia o contacto, este servicio público se consolida como una fuente burocrática que se aleja de su propio objetivo. Seguro que se me escapan muchos factores de coyuntura socioeconómica, pero no quiero hacer tanto un análisis profundo como poner de manifiesto algunas limitaciones subsanables y no necesariamente caras. La principal: Elaboración del currículum.
Algunos amigos me han pedido consejo a la hora de presentarse sobre un papel y siempre les hago la misma pregunta: qué vas a hacer con él y qué crees que van a hacer con él. Lo habitual es contestar: Buscar trabajo y lo van a echar a la papelera. La contradicción no puede ser más evidente y, al tiempo, desmoralizadora. Y pienso: Van a alucinar cuando vayan al SERVEF, donde tus casillas son limitadas y, por lo tanto, tienes qué elegir quien quieres ser para la Comunidad Autónoma.
Podrían poner más opciones en ese programa mágico que te tiene fichada si has tenido el sinsabor de ir un día a inscribirte y si bien el trato suele ser excelente y colaborativo, las caras son un poema. Tienes que olvidarte de la opción de dar un giro a tu actividad profesional y te quedas en las palabras claves o grupos que pueden o no coincidir con tu experiencia. Así que enfrente tienes a una persona que quiere ayudarte, mientras tú estás sentado en una silla respondiendo a preguntas que nunca te van a hacer en una entrevista de trabajo y pensando que lo haces porque lo tienes que hacer para cobrar el paro. Bueno, para pasar a otras dependencias donde uno se juega los cuartos, si es que le tocan.
La opción de humanizar 2.0 el SERVEF pasa necesariamente por modernizarlo, por implementar herramientas nuevas que den operatividad a esa gran base de datos. Incluir redes sociales o enlaces a blogs o páginas corporativas. Total te van a buscar, mejor ser conscientes de ello. Poder adjuntar imágenes gráficas, porque para el sector de comunicación necesitas un portfolio digital. Y me parece muy bien que la gente se tenga que buscar la vida y mirar las convocatorias, pero entonces para qué quieren los datos. Para coleccionarlos.
Los servicios hay que repensarlos para que sean efectivos y apuesta por hacerlo. ¿Cuánto presupuesto se necesita? No lo sé, pero se podría calcular. ¿No creen?